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:Nota de la Junta Editorial de Free Arab Voice: Para muchos izquierdistas de occidente, especialmente de EEUU, la cuestión de Iraq permanece imbuída de cierta ambigüedad. Saben que no es correcto apoyar una ocupación, pero siguen escuchando a esas supuestas asociaciones sindicales y de mujeres decir \"necesitamos la ocupación\". Por eso cuando la izquierda en EEUU denuncia la ocupación de Iraq, sólo pueden hacerlo con medias tintas, puesto que en cierta medida admiten que la ocupación en parte \"hace algún bien\". El resultado es que esta izquierda está terriblemente confusa y por tanto en un punto muerto, salvo un puñado de activistas. Por una parte esto se debe a la influencia sionista en Occidente, pero sobre todo la situación se debe al enorme caudal de desinformación, especialmente en lo relacionado a la resistencia iraquí. El siguiente texto de Nada Al-Rubaiee viene a llenar un importante vacío en esta cuestión. Durante la campaña de Bush para invadir Iraq, saltó a la palestra en varias ocasiones el tema de la mujer en Iraq. Una parte de este bullicio \"feminista\" fue protagonizada por algunas mujeres iraquíes que defendían la invasión en tanto medio de \"liberar\" a las mujeres de Iraq de la represión del hombre y del Estado. Tras la ansiada \"liberación\" de Iraq, algunas de estas mujeres fueron designadas para ocupar \"prestigiosas\" posiciones en diferentes instituciones del \"nuevo Iraq\" bajo ocupación; instituciones como el Consejo de Gobierno Iraquí (CGI) o el Gobierno Interino del primer ministro Iyad Alaui. Otras comenzaron a operar abiertamente en Iraq bajo la bandera de distintas ONGs financiadas externamente, al igual que en organizaciones de mujeres y de derechos humanos. En noviembre de 2003, una delegación de mujeres iraquíes visitaron la Casa Blanca, para agradecer personalmente a Bush el haber \"ayudado\" a Iraq y no haber retirado sus tropas, ya que \"Iraq todavía las necesita\". Algunos meses después, con ocasión del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, Colin Powell lanzó dos iniciativas: la Iniciativa por la Democracia de las Mujeres Iraquíes, y la Red EEUU-Iraq de Mujeres. Powell, además, destinó 10 millones de dólares para cubrir la primera iniciativa, y 27 millones más para la segunda. Surgen aquí multitud de preguntas: ¿Por qué la administración de EEUU dedica millones a la promoción de la democracia para las mujeres en el Iraq ocupado, mientras otras necesidades básicas humanas, como el agua y la electricidad no son mínimamente satisfechas? ¿Por qué es tan importante el tema de la mujer para los ocupantes? ¿Y cómo podemos explicar que se invierta tanto dinero en nombre de la democracia para bien de las mujeres, mientras en nombre de la misma democracia se humilla, tortura y asesina a miles de mujeres y hombres? Finalmente, ¿ Cuál es el papel de esas recién establecidas asociaciones de mujeres en este esquema? Muchas de estas organizaciones ¬si no todas- han comenzado a promover asuntos muy controvertidos en un país aún bajo ocupación. Sus lemas no se limitan a pedir \"libertad sexual y personal para las mujeres iraquíes\", si no que se enfrentan directamente a la resistencia a la ocupación. Es cierto que estas organizaciones dicen que es el pueblo iraquí quien debe liberarse de la ocupación. Sin embargo, lo dicen al mismo tiempo que piden el rechazo ¡a la \"actual resistencia terrorista iraquí\"! Mas aún, asumen como tarea propia la responsabilidad adicional de \"resistir al terrorismo islámico\". Pero, ¿no son estas las mismas líneas argumentales de Rumsfeld y Bush? No hay duda de que la retórica de estas organizaciones de mujeres toman prestado bastante de la terminología de la ocupación. Así, resulta totalmente lógico preguntarnos si existe un nexo entre tales llamadas a \"liberar a la mujer iraquí\" y los lemas adjuntos contra la resistencia. ¿Cuál es el denominador común entre la ocupación y estas asociaciones de mujeres? Estrafalarias acusaciones Tanto la ocupación como estas organizaciones han vertido acusaciones falaces y mezquinas contra la heroica resistencia en ciudades como, por ejemplo, Faluya. Ambas acusaron a la resistencia de cometer crímenes aborrecibles, como secuestrar y matar mujeres iraquíes \"por llevar vaqueros o no llevar el cabello cubierto\", o de violar a jóvenes ¡¿\"antes de de las violaran los ocupantes\"?! Esta última acusación fue realizada públicamente por la Organización por la Libertad de las Mujeres en Iraq (OLMI) contra el Consejo de la Shura de Faluya, un consejo religioso que sirvió como órgano portavoz de la heroica resistencia contra la brutal agresión del asedio de Faluya. La OLMI lanzó la acusación absurda según la cual el Consejo de la Shura emitió una fatua (decreto religioso) estipulando que los \"luchadores muyahidines deberían violar a las jóvenes a partir de los 10 años antes de que lo hicieran los americanos\". Estrafalarias acusaciones como éstas no cuentan con base alguna, pero muestran el verdadero rostro de organizaciones que han sido creadas únicamente para difamar a la resistencia y extender la ocupación. Procurando distraer la atención sobre los verdaderos criminales, tales organizaciones no dudan en promover el odio a la resistencia en toda ocasión. De nuevo en Faluya, y en una carta \"en defensa\" de la población de una ciudad destruída durante la continuada agresión de los ocupantes, la OLMI declaraba: \"Los terroristas islamistas intentan imponer sus leyes medievales a través del miedo y el horror\". De hecho, la OLMI no sólo acusa a la resistencia de cometer actos horribles, sino que además la define como una especie de agrupación de extranjeros que \"vienen a Iraq levantando espadas que gotean sangre\". Naturalmente, no podemos ignorar que existen crímenes e injusticias perpretadas contra las mujeres en Iraq. ¿Pero quien se encuentra tras esos crímenes?. Por ejemplo, en las provincias del sur de Iraq, muchas familias han sido amenazadas después que sus hombres y mujeres asistieran a reuniones de solidaridad con la resistencia, o, en palabras de las fuerzas de ocupación \"reuniones contra la ocupación, contra la coalición y contra el gobierno\". Muchas familias han sido forzadas a abandonar sus hogares para evitar el encarcelamiento o el asesinato de sus madres e hijas. Pero las \"organizaciones de mujeres iraquíes\", en lugar de acusar a las fuerzas británicas de ocupación o las colaboracionistas brigadas Badr por aterrorizar a las familias, acusan a los luchadores de la resistencia de cometer atrocidades contra las mujeres. Para estas organizaciones, la resistencia siempre es culpable de \"matar a toda criatura que se mueva\". En el norte de Iraq, el caso es ligeramente diferente. De acuerdo con un periódico iraquí, sólo en la ciudad de Kirkuk han sido raptadas unas 30 jóvenes, la mayoría de ellas camino de la escuela. Además de estos grupos criminales que raptan aleatoriamente a chicas jóvenes, también encontramos a las milicias peshmerga intentando forzar la salida de las familias árabes de Kirkuk, en la creencia de que gobernar la ciudad es su derecho histórico en tanto kurdos. Secuestros y asesinatos Mientras tanto, científicas iraquíes [1], doctoras, y profesoras universitarias están siendo sistemáticamente secuestradas, encarceladas y asesinadas. Surge aquí la misma cuestión crucial: ¿A quien beneficia la desaparición de estas mujeres? ¿Por qué siguen las científicas iraquíes languideciendo en las prisiones de la ocupación? Parece mas bien, que estas acciones son parte de la estrategia de las fuerzas de ocupación y sus aliados para eliminar los elementos básicos para reconstruir el antiguo y carismático Estado iraquí. Es decir, son parte del esfuerzo para inventar el Nuevo Iraq: un Iraq dependiente y débil. Evidentemente, la resistencia iraquí no tiene interés alguno en atacar a estas mujeres. Por el contrario, estas mujeres cualitativamente formadas son muy necesarias para liderar y apoyar la luchar contra la ocupación sionista e imperialista del país, para obtener nuestra libertad e independencia, y para escribir nuestra constitución. De hecho, las mujeres iraquíes son arrestadas y torturadas por el régimen Iraquí. Y ESA es la forma real que en que los EEUU \"trabajan\" por la liberación de la mujer iraquí, torturando a las mujeres, torturando a los hombres, y convirtiéndolos a todos en parte de la Resistencia. Un caso muy claro es el conocido de Fatimah en la tristemente célebre prision de abu Ghraib, quien fuera violada grupalmente por carceleros norteamericanos. Otro caso destacado es el de la mujer que fue asesinada por fuego estadounidense mientras intentaba recuperar el cuerpo de su hijo, luchador de la Resistencia, en Ramadi. Aún mas: las mujeres iraquíes han tomado parte activa en la resistencia en numerosas ocasiones. Por citar algunos ejemplos de principios de 2005, existen informes de mujeres guerrilleras en Mosul, al norte de Iraq, el 2 y 3 de Enero. Una semana después, un líder religioso lanzó una fatua urgiendo a las mujeres de la ciudad a coger un arma y luchar. También hubo un funeral de una mujer mártir que fue abatida en los combates, al que asistieron su marido e hijos, también luchadores. Las mujeres de la aldea de Al-Jazirah, cerca de Bagdad, jaleaban a los guerrilleros el pasado 11 de enero. Mujeres en Al-Mushahadah, Bagdad, arrojaron piedras a los Humvees norteamericanos el 9 de enero. En esas fechas, se vieron mujeres en los tejados de Ramadi portando armas, a la espera de los soldados americanos. Estos son los cambios reales, la liberación real de la mujer iraquí real, no la que vuela a Londres para hacerse la manicura, ni la que vuela a Washington para reunirse con Bush. Para clarificar más esta cuestión, queremos destacar el hecho de que la resistencia iraquí integra elementos islámicos y seculares, todos ellos con un mayoritario perfil antiimperialista, y con la prioridad básica de combatir a los invasores y sus esbirros. Tenemos un mensaje claro para estas organizaciones de mujeres: la liberación de la mujer es una noble causa, pero no será posible sin estar a la par con la lucha (armada) por la liberación nacional y por una Constitución escrita por los propios iraquíes. Nota: (*) Nada Al-Rubaiee es miembro del Comité Central de la Alianza Patriótica Iraquí (API) [1] Huda Salih Ammash y Rihaab Taha permanecen sin cargos bajo custodia del ejército de EEUU desde mayo del 2003. Ambas científicas fueron acusadas por EEUU de participar en los programas biológico, químico y de armamento de \"destrucción masiva\" del anterior gobierno iraquí. Ahora no existe prueba alguna de que el anterior gobierno mantuviera tales programas en el momento de la invasión de Iraq; sin embargo, éstas y muchos otros científicos permanecen en prisión. La Resistencia y la campaña de difamación de las \"Organizaciones de Mujeres Iraquíes\" Por Nada Al-Rubaiee (*) Freearabvoice.net, Traducción del inglés para CSCAweb de Natalia Litvina, 18/02/05
Enviado por http://blog.unijimpe.net
lunes, 26 de octubre de 2009
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